El 16 de enero del año 929 es proclamado en Córdoba Abd Al Rahman ibn Muhammad III como califa de Al Ándalus, lo que conllevó una declaración de independencia formal y pública por parte del estado andalusí. Esta declaración de independencia se realizaba frente a la potencia abasí de Bagdag en Oriente Medio y la fatimí de Cayruán en el norte de África. Abasíes y fatimíes eran las dos potencias que, junto con el Imperio Bizantino y Al Ándalus, se disputaban la hegemonía en el Mediterráneo.